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18 de junio de 2022
Saludos, mis ruteros, aquí de vuelta de la aventura que nos tenía emocionados de regresar desde hace un año, con el agradable sabor de haber disfrutado de la playa, un clima ideal y arena, mucha arena donde las máquinas dieron todo de sí en las dunas.
El equipo llegó desde el jueves para dar un reconocimiento de la ruta el viernes y así evaluar los mejores retos, condiciones y tiempos para disfrutar al máximo de Chachalacas, Veracruz.
Nos reunimos como costumbre en la playa por la mañana, donde aprovechamos para ajustar neumáticos, dar instrucciones a los pilotos de seguridad y técnica a emplear en esta ruta que tanto entusiasma y tiene su particular forma de atacar los obstáculos. Ya listos los participantes salimos alrededor de las 11:00 hacia nuestras primeras dunas, la caravana subió la ya conocida duna Mayor para bajar el tobogán de arena de uno, en uno iniciando con esto la emoción de dejarse deslizar en el todoterreno enfrentando la gravedad, el control del volante, mientras el paisaje del mar del horizonte completaba la experiencia de manera sin igual.
Después de dar algunas vueltas por este circuito, el contingente ya estaba listo para el siguiente nivel, adentrándonos en las crestas, bajadas, rampas, conos que nos iban sorprendiendo con adrenalina cada vez que los cruzamos.
Algo que le da un atractivo especial a las dunas, no solo es ser las más grandes la Latinoamérica, ni que están en constante transformación por el viento, si bien podemos identificar algunas que siempre están, el camino a seguir no siempre es el mismo, pues se erosiona y modifica constantemente, el factor clima y humedad juega un papel importante, donde el comportamiento de la arena húmeda no es igual al de la mojada o totalmente seca; lo que nos da muchas opciones para vivir una aventura 4x4 única y nueva cada vez que la recorremos.
No podíamos dejar de deslizarnos por la Duna de la Medialuna, subir y bajar los valles de arena que tanto imponen y lucen con un cielo azul y el mar esmeralda de Chachalacas. En momentos el sol se intensificaba y después se nublaba, dando la impresión de que vendría la lluvia, que al final termino siendo alguna llovizna ligera y refrescante; lo que si el viento después del medio día fue constante y veíamos la arena desplazarse lenta pero constante en el terreno árido de nuestra ruta.
Algunos vehículos sortearon mejor la ruta, donde pasaban sin problema unos, otros se embancaron y tuvieron que ser enganchados para apoyarlos y poder continuar el trazo previsto. Incluso se dio el caso de uno con llanta desmontada y otro se deslizó por una pendiente sin mayor problema y fue atendido por el equipo experto de nuestro crew.
Tras recorrer más de 12 km de subidas, bajadas, curvas, rodeos, toboganes, crestas, completamos el recorrido saliendo a la carretera para despedirnos de todos nuestros amigos en la gasolinera donde se llenaron los tanques e inflaron neumáticos para seguir a su destino con seguridad en carretera.
Gracias a todos los que compartieron esta experiencia, por seguir las instrucciones de seguridad y hacer de esta ruta una de las más esperadas y divertidas del año, un abrazo y nos vemos en la siguiente.